Quiropráctica
La manera en que la quiropráctica ayuda es por medio de ajustes sobre la columna vertebral, las extremidades y las vísceras brindando renovada información al sistema nervioso e inmunológico para que se repare y equilibre la mecánica corporal. Además, los quiroprácticos pueden hacer mucho más que ajustes sobre la columna vertebral, interviniendo con los estilos de vida, actividad física, técnicas de relajación, hábitos alimentarios y suplementos requeridos para lograr los objetivos propuestos. Resultados: elimina las tensiones, el dolor, mejora la calidad del sueño, actividad sexual, la digestión, el estado de ánimo y el humor.
Evidencias indican que después de recibir un ajuste quiropráctico en el cuello y espalda, los centros cerebrales responsables del procesamiento del dolor se activan disminuyendo los síntomas y reduciendo los niveles de cortisol, que es una hormona presente en situaciones de estrés.
Medicina Biorreguladora
Para revertir procesos inflamatorios dolorosos e infecciosos la medicina convencional dispone de geniales y avanzados recursos tecnológicos llamados fármacos o medicamentos. Muchos de ellos son diseñados bajo el entendimiento de tratar enfermedades con compuestos que estimulan procesos inmunes, analgésicos y de reparación pero que inhiben otros generando con frecuencia otros desbalances químicos, fisiológicos y funcionales no deseables pero “necesarios”.
Baste leer las contraindicaciones de la mayoría de los antihistamínicos, antibióticos, antiinflamatorios, antipiréticos, antidepresivos para atestiguar esto.
La medicina Biorreguladora trata personas bajo una perspectiva personalizada basada en integrar y estimular redes fisiológicas utilizando para ello componentes homeopáticos, fitoterápicos y nutracéuticos naturales a fin de estimular los componentes “pro” del organismo sin interferir en otros procesos de manera perjudicial.
También recurre como el eje principal del equilibrio de la salud a una intervención biológica y funcional de la alimentación.
Nutrición Funcional
Al ingerir alimentos, agua de grifo, al respirar, al utilizar cosméticos y detergentes absorbemos compuestos que pueden resultar perjudiciales para nuestro organismo.
Compuestos químicos presentes en el medio ambiente y en algunos alimentos que de no ser eliminados resultan tóxicos y juegan un rol importante en la generación o persistencia de síntomas dolorosos y discapacitantes.
La indemnidad de los órganos encargados de eliminar desechos y toxinas es fundamental para ello.
La piel, el pulmón, el riñón, el sistema linfático y el intestino son los principales órganos emuntorios. Y el hígado es el actor principal en el procesamiento de las toxinas.
Por ello, cuidarlos resulta fundamental en la búsqueda de una solución integral a los síntomas dolorosos, a la sensación de agotamiento, al tránsito intestinal alterado, algunas depresiones, insomnio, bruxismo etc.
Un abordaje quiropráctico integrado con una propuesta de detoxificación es una excelente estrategia de solución que brinda en el corto plazo una mejor condición general y la tan anhelada disminución de dolores y malestares.